Este asteroide pesa alrededor de 450 millones de toneladas y durante su rotación cruza la órbita de Marte y la Tierra. Cómo se limpia su superficie es un misterio.
Este cuerpo espacial cercano a la Tierra es el objetivo de la sonda japonesa Hayabusa-2. La misión de esta sonda es tomar y entregar a la Tierra muestras de tierra del asteroide. El año pasado, aterrizó varios robots controlados en la superficie del Ryugu.
En el mismo año, Hayabusa-2 dejó caer una pequeña carga en la superficie del asteroide para estudiar los procesos en su superficie y en la colisión de los cuerpos celestes. Unos meses más tarde, la sonda misma se sentó en la superficie del cuerpo celeste para recoger escombros. Se espera que para fines de 2020 estén en la Tierra.
Los astrónomos estudian más a fondo las imágenes que provienen de la sonda Hayabusa. La publicación autorizada Science publicó recientemente los resultados de estudios según los cuales la superficie del asteroide no tiene polvo. Se ve increíble porque Los asteroides se mueven en el sistema solar durante mucho tiempo, la erosión inevitable necesariamente deja rastros de polvo en su superficie. Pero incluso las imágenes de alta resolución no detectaron partículas de menos de 100 micras en Ryuga.
La ausencia de polvo en la superficie de este cuerpo celeste indica algún proceso geológico que limpia el asteroide. Es posible que todavía haya polvo en el asteroide, pero está oculto en las grietas o se lo lleva al espacio exterior después de una colisión con pequeños meteoritos.
Es posible que a medida que el asteroide se acerca al Sol, su superficie comienza a calentarse y el hielo se evapora, llevando consigo pequeñas partículas de polvo. Por ejemplo, se encontraron los mismos fenómenos en la superficie del asteroide Bennu. Sin embargo, hay un "pero": las reservas de hielo en el Ryuga están muy lejos de ser impresionantes.
Presumiblemente, el asteroide gira hacia el Sol en diferentes direcciones y se calienta de manera desigual. De esto se deforma. Debido a esto, las rocas comienzan a agrietarse bruscamente, y parte del polvo todavía está oculto dentro de las fallas o se extiende al espacio.
Sin embargo, hoy es solo una suposición. Los astrónomos continúan buscando la respuesta a la pregunta de por qué la superficie del asteroide es lisa. Quizás la tecnología del futuro cercano nos acerque a las respuestas correctas.